120 barcos de 30 países se preparan para el desafío de la Rolex Middle Sea Race
- Dario D'Atri
- hace 36 minutos
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La icónica regata mediterránea celebra su 46ª edición con una salida espectacular desde La Valeta el próximo sábado 18 de octubre. Entre los inscritos figuran campeones recientes y equipos legendarios dispuestos a conquistar las 606 millas náuticas que rodean Sicilia
El Mediterráneo se prepara para vivir uno de los espectáculos náuticos más impresionantes del año. El próximo sábado 18 de octubre, a las 11:00 horas, los cañones de Saluting Battery en La Valeta, Malta, marcarán el inicio de la 46ª edición de la Rolex Middle Sea Race, una de las regatas oceánicas más desafiantes y prestigiosas del calendario internacional. Cerca de 120 embarcaciones de 30 nacionalidades diferentes se congregarán a los pies de los bastiones de la capital maltesa para protagonizar una estampa que año tras año confirma la vigencia de esta competición legendaria.
Una tradición oceánica de casi seis décadas
Desde 1968, la Rolex Middle Sea Race se ha consolidado como una cita ineludible en el calendario de las regatas de altura del Mediterráneo. Su recorrido de 606 millas náuticas (1.125 kilómetros) que parte y regresa a Malta, circunnavegando Sicilia en sentido antihorario, representa uno de los mayores retos para los navegantes que se atreven a enfrentarla. No es solo una prueba de habilidad técnica, sino una auténtica batalla contra los elementos donde el espíritu de equipo y la resistencia mental resultan tan determinantes como la pericia marinera.
La regata es conocida por sus condiciones impredecibles y extremadamente variables. Los competidores pueden enfrentarse a todo tipo de inclemencias meteorológicas en cuestión de horas. Las comidas y el sueño se toman a toda prisa, descansar o cambiarse de ropa se convierte en un lujo que a menudo no está al alcance de las tripulaciones. La diversidad de retos que presenta el recorrido hace que sea tanto una prueba de espíritu como de habilidad, y sus recompensas se miden por algo más que por los simples resultados deportivos.
Las palabras de los campeones
Tom Slingsby, embajador de Rolex, campeón olímpico y tres veces nombrado Rolex World Sailor of the Year (Mejor Regatista del Año), experimentó en primera persona la magnitud del desafío en 2021 cuando participó a bordo del supermaxi Comanche. Esa temporada consiguió un triplete histórico poco habitual: la victoria en categoría monocascos, la victoria absoluta y un nuevo récord de recorrido. Sus palabras reflejan la esencia de esta competición:
"La Rolex Middle Sea Race puede ser uno de los recorridos más bonitos, pero también es uno de los más complejos. Lo tiene todo: estrechos pasos de marea, tramos en mar abierto, vientos suaves, brisas fuertes, altas montañas e islas. La variedad es implacable. Lograr tanto en mi primera regata es algo de lo que siempre estaré orgulloso, pero el verdadero logro radica en encontrar el valor para enfrentarse a los elementos y experimentar cómo un equipo puede unirse para superar los retos".
Robert Scheidt, otro de los embajadores de Rolex y quíntuple medallista olímpico, comparte una visión similar sobre la dureza de la prueba: "Si quieres experimentar lo mejor de la navegación oceánica, la Rolex Middle Sea Race es una regata imprescindible. Puede ser dura, puede ser brutal. Sólo completar un recorrido como el de la Rolex Middle Sea Race ya es un logro. Hay que reunir muchas cosas. Cuando cruzas la línea de meta, sea cual sea el resultado, sabes que has logrado algo especial".
Un recorrido de belleza salvaje y desafíos técnicos
El evento combina todos los ingredientes de una gran regata oceánica. La salida desde La Valeta ofrece uno de los marcos más espectaculares del calendario náutico internacional. A lo largo del recorrido alrededor de Sicilia, los navegantes se encuentran rodeados de naturaleza y vida salvaje mientras transitan por símbolos icónicos del Mediterráneo.
Entre los hitos geográficos que marcan la ruta destacan la isla volcánica de Stromboli, con su cono activo iluminando las noches; la belleza escarpada de las islas Eolias y Egadas; el imponente volcán activo del Etna, visible desde muchos puntos del recorrido; y los aislados puestos avanzados de Pantelleria y Lampedusa, ambos más cercanos a África que a Europa, que añaden un componente de navegación oceánica en pleno Mediterráneo.
Los frecuentes cambios en el rumbo de la brújula provocados por el carácter circular del recorrido pueden dar lugar a múltiples variaciones en las condiciones encontradas, desde la fuerza y el ángulo del viento hasta el tamaño y la forma de las olas. La regata puede pasar de ser benigna a feroz en un abrir y cerrar de ojos, poniendo a prueba la capacidad de adaptación de las tripulaciones y la resistencia de las embarcaciones.
Una flota estelar con aspirantes al título
Celebrada deliberadamente al final de la temporada de regatas en el Mediterráneo, la Rolex Middle Sea Race atrae a quienes no vacilan en su deseo de enfrentarse a lo desconocido, y suele reunir flotas excepcionales. La edición de 2025 no es una excepción: entre los 118 equipos de 30 nacionalidades que han formalizado su inscripción, figuran nombres que ya conocen el sabor de la victoria y que llegan con credenciales impresionantes.
Red Bandit, ganador absoluto en 2024 con un TP52, regresa este año con ambiciones renovadas compitiendo con el Botín 56 Black Pearl, una embarcación de alto rendimiento que promete batalla en la clasificación general.
Black Jack 100, reciente ganador de la Rolex Fastnet Race 2025, llega a aguas maltesas como uno de los grandes favoritos, trayendo consigo la confianza de una tripulación que acaba de conquistar una de las regatas oceánicas más prestigiosas del mundo.
Elusive 2, el héroe local maltés, buscará repetir sus triunfos de 2019 y 2020. El conocimiento de las aguas locales y el apoyo del público de La Valeta pueden jugar un papel importante en sus aspiraciones.
Stormvogel representa el vínculo directo con la historia de la regata. Este legendario velero ganó en tiempo real en la edición inaugural de 1968 y repitió en 1969, convirtiéndose en el primer bicampeón de la competición. Su presencia añade un componente de continuidad histórica que conecta las primeras ediciones con la actualidad.
El respaldo de Rolex: más de dos décadas de colaboración
Tanto la regata como su organizador, el Royal Malta Yacht Club (RMYC), cuentan con el patrocinio de Rolex desde 2002, como parte de una relación de la relojera suiza con el deporte de la vela que se remonta casi 70 años. La Rolex Middle Sea Race comparte categoría con otros referentes absolutos de las regatas oceánicas como la Rolex Fastnet Race, la Rolex Sydney Hobart Yacht Race y la Rolex China Sea Race, conformando un selecto grupo de competiciones que representan lo más alto de la navegación de altura a nivel mundial.
Mark Napier, comodoro del Royal Malta Yacht Club, expresa con orgullo la importancia de esta colaboración: "A menudo nos dicen que el mero hecho de completar esta regata es un logro que hay que valorar, y cada año es un privilegio para el Royal Malta Yacht Club dar la bienvenida a todas las tripulaciones, tanto a las que participan por primera vez como a las que vuelven una y otra vez. Desde que comenzamos nuestra colaboración con Rolex, hace más de 20 años, la
Middle Sea Race ha atraído constantemente a una flota estelar de todo el mundo, con tripulaciones que van desde talentos de la vela de élite hasta intrépidos y hábiles regatistas amateur. Esto es motivo de gran orgullo".
El codiciado premio de la regata es el trofeo Rolex Middle Sea Race, que se otorga al ganador absoluto en tiempo compensado junto a un reloj Rolex especialmente grabado. Este galardón se ha convertido en uno de los más prestigiosos del circuito internacional de regatas oceánicas, no solo por su valor material sino por lo que representa: haber conquistado uno de los recorridos más desafiantes del Mediterráneo.
La salida: un ritual con historia
Como es tradición, los cañones de Saluting Battery marcarán el inicio de la aventura para cada una de las clases participantes. El primer cañonazo sonará a las 11:00 horas del sábado 18 de octubre, dando inicio a una secuencia de salidas escalonadas que permitirá a cada clase comenzar su particular batalla contra el cronómetro y los elementos.
La ubicación de la salida, en las aguas frente a La Valeta, ofrece un espectáculo visual sin parangón. Los bastiones históricos de la capital maltesa, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sirven de telón de fondo a una flota moderna y tecnológicamente avanzada que se dispone a desafiar el Mediterráneo. La combinación de historia y modernidad, de tradición y tecnología, resume perfectamente el espíritu de esta regata que mira al futuro sin olvidar sus raíces.
El mediterráneo como escenario de leyenda
La Rolex Middle Sea Race representa la esencia de la navegación oceánica en el Mediterráneo. Mientras otras regatas legendarias tienen lugar en océanos abiertos o mares del norte, esta competición demuestra que el Mare Nostrum sigue siendo un escenario capaz de plantear los mayores desafíos a los navegantes más experimentados del mundo.
El próximo sábado, cuando los cañones resuenen en La Valeta y las velas se eleven hacia el cielo mediterráneo, 120 tripulaciones iniciarán una aventura que pondrá a prueba todo lo que han aprendido sobre navegación, resistencia y trabajo en equipo. Algunas buscarán la gloria de la victoria, otras simplemente completar el recorrido. Pero todas compartirán la misma experiencia: enfrentarse a uno de los retos más apasionantes que ofrece la vela oceánica contemporánea.
Como señala la filosofía de Rolex que impregna esta regata: no se trata solo de llegar primero, sino del camino recorrido, de los retos superados, de la excelencia demostrada en cada milla náutica. En la Rolex Middle Sea Race, cada tripulación que cruza la línea de meta, independientemente de su posición, puede afirmar con orgullo que ha conquistado el Mediterráneo.
La cuenta atrás ha comenzado. El 18 de octubre, Malta volverá a ser el epicentro de la vela oceánica mundial.
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