Navico Group y Maccaferri Futura unen vela y tecnología para investigar la salud de los océanos

La vela oceánica se ha convertido en mucho más que un desafío deportivo. En septiembre de 2025, Navico Group y Maccaferri Futura han unido fuerzas en un proyecto que transforma un velero Class40 de regata en laboratorio flotante, capaz de recopilar y transmitir en tiempo real información clave sobre la salud de los océanos.

La iniciativa nace de la colaboración entre Officine Maccaferri, empresa líder en ingeniería civil y medioambiental, y el navegante italiano Luca Rosetti, una de las jóvenes promesas de la vela oceánica. Con apoyo de Navico Group y de la Unión Europea a través de la misión “Restore our Ocean and Waters”, el proyecto busca situar a la vela de competición como plataforma útil para la investigación científica.

En el corazón del sistema se encuentran la SOOP Sailing Box y la OP Box de Navico Group, integradas en los equipos de a bordo de marcas como B&G. Junto a los sensores desarrollados por NESA —empresa del Grupo Maccaferri—, el barco mide temperatura, salinidad, oxígeno y pH en tiempo real mientras navega en regata. Los datos se transmiten directamente a la plataforma EMODnet Physics, quedando disponibles para la comunidad científica internacional.

Para los impulsores del proyecto, la alianza es un paso decisivo. “La vela de competición se convierte en una herramienta valiosa para la investigación oceánica”, explica Giulia Albuzio, directora del equipo Maccaferri Futura. El propio Rosetti lo resume desde su experiencia en cubierta: “En alta mar, la tecnología marca la diferencia. Ahora, además de competir, podemos aportar a la ciencia”.

La propuesta encarna un doble mensaje: por un lado, demuestra que el rendimiento deportivo y la innovación tecnológica pueden convivir; por otro, que el mar necesita nuevas miradas y soluciones. Al integrar ciencia y navegación, el Class40 de Maccaferri Futura no solo persigue la victoria en regata, sino también un horizonte más amplio: proteger el océano que hace posible la propia aventura náutica.